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Conozca la historia de la tarta Saint Honoré
Cuando el Santo anunció a su nodriza que quería ser sacerdote, ella estaba haciendo pan.
"¡Cuando mi pala tenga hojas, serás obispo!" se burló la buena mujer.
Y con esas palabras, el milagro ocurrió. Para su asombro, la pala estaba cubierta de hojas.
Nació en el pueblo de Port-le-Grand, en Ponthieu, a principios del siglo VI. Fue ordenado obispo de Amiens y fue santificado en el siglo XI.
Tanto es así que su fama se extendió por todo París y los habitantes de Picardía le construyeron una iglesia.
Mientras tanto, en 1202 un panadero parisino ofreció 9 acres de tierra para construir una capilla en su honor.
De hecho y como resultado, la calle y el Faubourg Saint Honoré se han hecho famosos en todo el mundo, al igual que la pastelería del mismo nombre.
Inventado en 1847 por un joven pastelero de las pastelerías de Chiboust, el pastel saint honoré era inicialmente un gran brioche relleno de crema pastelera.
Cuando Auguste Julien, el joven pastelero en cuestión, fundó su pastelería, revisó la receta, que se convirtió en la que conocemos hoy en día.
El pastel consiste en una base de hojaldre, masa de pan o pasta quebrada, rodeada de un cordón de "petit choux", rellena de crema de vainilla y caramelizada.
Y se termina rellenando el centro con crema Chiboust o Chantilly montada en forma de corona, en honor de su deidad.
En el siglo XV, la primera hermandad de panaderos se estableció en París, en la iglesia que lleva su nombre.
En conclusión:
¡Es el patrón de los panaderos y pasteleros!
Pastelería y panadería con producción propia artesanal
Comida sana, Brunch diario; Catering
Almuerzos y meriendas;
Menús de desayuno;
Ambiente relajado, amabilidad y profesionalidad
Fábrica y tienda:
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1350-325 Lisboa
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